En el puerto espacial de Korou, en la Guayana Francesa, e impulsado por la Agencia Espacial, despegó el cohete Vega C de fabricación europea que transportó el satélite Biomass hacia el espacio.
El satélite Biomass estará situado a 666 kilómetros sobre la superficie de la tierra, y fue fabricado por la división de Airbus en Reino Unido, con la colaboración en compañías tales como GMV y Sener, ambas españolas. El objetivo del satélite Biomass es medir la cantidad de carbono que los bosques, también conocidos como masas forestales, son capaces de absorber, lo que ayudará con las predicciones del cambio climático.
Menos de una hora después del lanzamiento, Biomass se separó de la etapa superior del cohete. A las 12:27 CEST, los controladores del satélite en el Centro Europeo de Operaciones Espaciales de la ESA en Alemania recibieron la señal inicial, retransmitida vía la estación terrestre Troll en la Antártida, que confirma que Biomass está funcionando como se esperaba en órbita.
Portadora del primer radar de apertura sintética en banda P en el espacio, la misión Biomass está diseñada para proporcionar información crucial sobre el estado de nuestros bosques y cómo están cambiando, y para ampliar nuestro conocimiento del papel que juegan los bosques en el ciclo del carbono.
Los bosques juegan un papel vital en el ciclo del carbono en la Tierra al absorber y almacenar grandes cantidades de dióxido de carbono, ayudando a regular la temperatura del planeta. A menudo llamados ‘los pulmones verdes de la Tierra’, absorben alrededor de 8 mil millones de toneladas de dióxido de carbono anualmente. Sin embargo, la deforestación y la degradación, especialmente en regiones tropicales, están liberando el carbono almacenado de nuevo a la atmósfera, empeorando el cambio climático.
Fuente: https://www.esa.int/Space_in_Member_States/Spain/Lanzamiento_de_Biomass_para_medir_el_carbono_forestal