La tasa de uso de cinturón de seguridad en Argentina es de tan solo el 50%. Y la industria automotriz busca cambios urgentes en seguridad vial.
La Seguridad Vial se ha convertido en un tema prioritario en Argentina, y las estadísticas revelan que aún hay mucho por hacer para mejorarla. El 2022 hubo un total de 6.184 fallecidos por accidentes de tránsito vehicular en todo el país, según informa la organización Luchemos por la Vida.
Ante tal situación, y con el objetivo de reducir el número de accidentes y de víctimas en las carreteras argentinas, la industria automotriz viene realizando una serie de mejoras en sus vehículos, como es el caso de los ADAS –Advanced Driver Assistance Systems-, que son dispositivos auxiliares electrónicos en los vehículos para asistir al conductor en determinadas situaciones que se presentan cuando se maneja.
Uno de estos ejemplos es el Control de Estabilidad, obligatorio para todos los autos 0km que se vendan en territorio nacional desde enero del 2022. Se trata de una herramienta que permite mantener el control del auto al realizarse maniobras de emergencia, tales como esquivar objetos en la camino, reduciendo las posibilidades de despistar o volcar.
El cControl de Estabilidad es uno de los elementos que más gente salvó en el mundo después del cinturón de seguridad de tres puntos. La tasa de uso de cinturón de seguridad en Argentina es de tan solo el 50%, un número que evidencia la necesidad de continuar concientizando sobre su importancia al salir a la calle.
Otro elemento mejorado es con el Sistema de Mantenimiento Autónomo de carril, el que aún no es obligatorio en Argentina. El sistema permite que el auto detecte el costado del carril y enderece la marcha, es decir que pasa por sobre la decisión de la persona y corrige la dirección del vehículo.
Esto es importante porque el 51% de los choques en Argentina se dan de frente y aportan el 60% de las muertes.
Otros sistemas en estudio son el Detector de Sueño, un dispositivo capaz de leer la pupila del ojo del conductor y el parpadeo para medir si se está quedando dormido, momento en el cual emiten el sonido de una chicharra para despertarlo. Y, también el sistema Alcohol Interlock que impide que arranque el vehículo cuando el conductor ingirió bebidas alcohólicas.
Fuente: https://www.pilaradiario.com/la-pancha/seguridad-vial-cambios-la-industria-automotriz-n5443594
