Para muchos niños, las mascotas de la familia pueden llegar a ser incluso sus mejores amigos. Un compañero que no solo provee amor incondicional, sino que además enseña sobre la amistad, responsabilidad, lealtad y empatía. Las mascotas no son entretenciones temporales, sino que son seres vivientes que dependen absolutamente de toda la familia, principalmente de los adultos. Si considera que su hijo está preparado, entonces primero llévelo a casa de amigos o familiares que tengan mascota para ver cómo se desenvuelve con ellos. La mejor mascota será aquella que reciba un buen proceso de socialización, logre satisfacer sus necesidades fundamentales (nutricionales, conductuales y sanitarias) y reciba tanta atención como sea necesario para cada especie. Para ello, es importante que eduquemos a los niños con respecto a la necesidad de que sean empáticos con sus mascotas. Explíquenle que aunque la mascota sea muy dócil y tolerante con ellos, siempre habrá límites que respetar. La mejor forma de enseñar a los niños a ser un buen cuidador de mascotas, es demostrando con el ejemplo. Reúnanse en familia y adquieran compromisos compartidos. Esto les permitirá no solo ser mejores amos, sino que además serán mejores personas.
Por último, no olvide considerar lo siguiente:
-Para qué o por qué queremos una mascota?
-Las características de mi grupo y entorno familiar, me permiten tener una?
-Tengo espacio disponible suficiente para tener una mascota?
-Tenemos tiempo y energía para dedicarle?
-Considerar presupuesto familiar. Las mascotas implican gastos en alimento, veterinario, entretención y otros.
Dr. Gonzalo Chávez C. Médico Veterinario,
Jefe de Carrera Universidad Santo Tomás – Viña del Mar.
Presidente de la Asociación de Etología Clínica Veterinaria de Chile (www.asecvech.cl)